Risotto de Pollo cremoso

Receta de Risotto de Pollo cremoso.

Como ya os dije ayer vamos a preparar un Risotto de Pollo, muy rico, muy cremoso y muy barato, ya que ningunos de los ingredientes es especialmente caro. La única complicación que tienen los Risottos es que hay que hacerlos con cariño, porque se tiene que estar moviendo constantemente durante el tiempo de cocción del arroz y añadirle el caldo a poquitos según se vaya secando, para obtener esa textura cremosa.

Ingredientes para 4 personas:

• 400 gramos de arroz (yo he utilizado el arroz para Sushi que ya os mostré, y sale GENIAL)
• 400 gramos de pollo (en cubos o tiras, al gusto)
• 80 gramos de mantequilla
• 80 gramos de queso parmesaso
• Medio pimiento 
• Un puerro o una cebolla pequeña
• 2 cucharadas de Aceite de Oliva
• 2 Litros de caldo de pollo (casero o de cubos)
• Sal y pimienta
• Colorante alimenticio (opcional, a mi crío le gusta amarillo)

Con estos ingredientes tan sencillos haremos un plato que estará para chuparse los dedos, lo primero que vamos a hacer sera limpiar y picar MUY finamente el puerro y el pimiento, podemos triturarlo si no nos vemos muy duchos con el cuchillo. Lo pondremos a rehogar a fuego medio con la mitad de la mantequilla y las 2 cucharadas de Aceite de Oliva.

Cuando las verduras estén listas, añadiremos el pollo cortado y salpimentado y lo sofreiremos hasta que pierda su color a crudo, en ese momento agregaremos el arroz y los rehogaremos todo junto para que los granos se empapen bien, observaremos como se van quedando transparentes.

Pondremos el caldo que tengamos a calentar para que esté bien caliente para cuando lo vayamos agregándolo al arroz, con 2 litros tendría que ser más que suficiente, si nos quedáramos sin caldo usamos agua caliente y listo.

Y ahora empieza el "trabajo", agregaremos 2 o 3 cazos de caldo e iremos mezclando constante y suavemente, dejando que cueza despacito para que vaya soltando todo el almidón en el caldo.

Si queremos podemos incorporar el colorante para darle colorcito, es opcional. Vamos agregando caldo sin parar de remover un mínimo de 15 minutos, comprobaremos de sal y la dureza del grano, hasta que esté a nuestro gusto. Cuando le pongamos el queso soltará bastante sal, así que mejor no pasarse.

Como veis en la foto de abajo, en mi caso prácticamente he gastado los 2 litros de caldo. 

Ya al final del todo, agregamos un poquito más de caldo si observamos que está demasiado seco y añadimos la mantequilla que teníamos reservada y el queso rallado tipo Parmesano (podemos añadir más o menos cantidad, según nuestro gusto)  y lo mezclamos todo bien,

Ya sólo nos queda emplatar la ración y espolvorear un poco más de queso rallado por encima, si queremos decorar podemos picarle un poco de perejil o cebollino muy picadito. Hay que comérselo bien caliente y recién hecho, así que aseguraos que todos los comensales estén sentados y con las manos limpias...

Que os aproveche...