miércoles, 6 de noviembre de 2013

Espinacas a la Crema

Receta de Espinacas a la Crema:

Vamos a preparar una de las recetas de verduras que más me gustan, unas espinacas frescas a la crema. Una buena forma de introducir esta verdura entre los niños y hacer que se alimenten de una forma sana y equilibrada. Pese a lo que más de uno pueda pensar, la cantidad de bechamel que ésta receta lleva (para 4 personas) resulta un aporte calórico insignificante. Y como siempre intento, receta que admite estar en el tupper unas cuantas horas.

Ingredientes para 4 personas:

  • 2 bolsas de espinacas (de las que vienen ya limpia)
  • 2 cucharadas de mantequilla o margarina
  • 2 cucharadas de harina 
  • 1 vaso de Leche Semidesnatada
  • Un poco de queso rallado (tipo Grana Padano)
  • Sal, pimienta y nuez moscada
  • Una cucharada de Aceite de Oliva


De las dos bolsas de espinacas que tenemos, pondremos a coce 1 bolsa y media (la otra la aprovecharemos para una Ensalada de Espinacas Frescas) en abundante agua con sal, durante unos 8 minutos removiéndolas de vez en cuando.


Una vez cocidas las dejaremos escurrir MUY bien, utilizando una espátula o paleta para estrujarlas y que suelten todo el exceso de agua, cuanto más secas mejor. En una cazuela ponemos la mantequilla y la cucharada de aceite a fundir a fuego medio, cuando ya esté fundida la mantequilla, añadiremos la harina rehogándola durante unos 2 o 3 minutos, y removiendo con la ayuda de una varilla para que no se formen grumos.


Pasado ese tiempo, verteremos el vaso de leche mezclándolo con la varilla poco a poco, subiremos un poco el fuego y le pondremos una cucharada del queso rallado, la sal, la pimienta y la nuez moscada, todo ello removiendo para que el queso se funda con la salsa Bechamel. Cuando la bechamel comience a espesar, añadiremos las espinacas que teníamos tan bien escurrida.


Como muestro en la foto, nos ayudaremos de unas tijeras para ir dando cortes a las hojas de espinacas para ayudar a partirlas y que sean más agradables de comer. Ahora sólo nos quedara dejar que cuezan un poquito, ya que las espinacas seguirán soltando agua por muy bien que las hayamos estrujado, y además no queremos que se nos quede como una sopa.
Las colocaremos en un plato o una fuente, las espolvoreamos con el queso rallado y ahora podemos hacer dos cosas, o bien comerlas tal cual, o gratinar un poco el queso. En cualquier caso, ya tenemos nuestras espinacas listas para comer...


Que os aproveche...







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